Realizar un voluntariado siempre se ha planteado como una actividad en la que tú ayudas a otros, pero rara vez se habla de lo mucho que puede ayudarte esta experiencia a ti. El salir de nuestra zona de confort con el objetivo de contribuir a mejorar un poco el mundo supone una aventura que merece la pena experimentar al menos una vez en la vida, aunque la mayoría de las personas que la han vivido quieren repetirla o, sencillamente, no abandonarla nunca. Como es evidente, existen muchos tipos de voluntariado, y no todos precisan de un largo viaje a un país extranjero. En tu propio país puedes realizar voluntariado, ya que el objetivo de este es que ayudes a quienes lo necesitan, y personas necesitadas de ayuda hay en todo el planeta. Puedes ofrecer tu tiempo para atender en comedores solidarios, o reforzar asignaturas escolares con niños que no pueden permitirse ir al colegio o que, por motivos personales, no rinden bien. Sea lo que sea lo que estás buscando, si lo que quieres es poder ofrecer tu ayuda y experimentar una vivencia inigualable, el voluntariado es una opción muy completa.
Las oportunidades que tienes ante ti son inmensas, pero si quieres sacarle el máximo provecho a una aventura de estas características, lo mejor que puedes hacer es recurrir plataformas como AdventureVolunteer, que te plantean programas de voluntariado en diversos países para que no solo te enriquezcas con la aventura, sino también con el viaje, ya que lo que traerás a casa después de esta experiencia será mucho más de lo que te lleves en primer lugar.
Siempre se ha dicho que viajar supone el mayor aprendizaje de todos. Es la mejor manera que tenemos de empaparnos en culturas nuevas, de comprender la perspectiva de otras personas, de abrir nuestra mente, y de conocernos a nosotros mismos. Si a todo ello le sumamos el aportar nuestro granito de arena para mejorar la vida de alguien, los recuerdos y las sensaciones con las que nos quedaremos de una experiencia como esta son inigualables. Sin embargo, hay algo que, a la larga, valoraremos por encima de todo, y son los vínculos que crearemos con las personas que compartan nuestro viaje con nosotros.
Por qué una amistad surgida en un voluntariado es para toda la vida
Por norma general, si optamos por un voluntariado en el extranjero, tenemos que tener presente que toda la experiencia conllevará algo nuevo para nosotros. Corrijo, todo durante esa experiencia será nuevo. Y es precisamente en lo nuevo, en lo que no conocemos, en lo que podemos conocernos mejor a nosotros mismos. Nos llevamos a nuestros límites porque no podemos aferrarnos a aquello que ya conocemos, ni a las personas que llevan con nosotros toda la vida. Y es precisamente por eso por lo que las amistades que formamos durante un voluntariado son para toda la vida: porque han surgido de un momento feliz, pero desconocido. Es un momento en el que hemos dado lo mejor de nosotros mismos; se trata de una amistad surgida en un viaje de autoconocimiento, y nos sentimos más libres para experimentar con nuestra personalidad. No es lo mismo trabar una amistad con alguien nuevo que te conoce bajo esas circunstancias, que tratar con alguien a quien conoces desde siempre. Tus posibilidades son muchas, y, en contra de todo pronóstico, se te da la oportunidad de ser tú mismo a muchos más niveles.
Además, las experiencias que se viven durante un voluntariado son intensas, y es precisamente en ellas en las que nos damos cuenta de a quiénes tenemos cerca, por no decir, claro, que el haber vivido juntos determinadas circunstancias ayudan a fortalecer un vínculo entre personas. Y a todo ello hay que sumarle que, si has conocido a una persona realizando un voluntariado, es muy probable que tenga los mismos valores que tú, y un compromiso humanitario o ecológico tan alto como el tuyo, lo que no deja de crear los intereses comunes que riegan una amistad.
En general, son amistades capaces de durar toda la vida, aunque no puedas ver a menudo a esa persona, o aunque no habléis diariamente. Un año de voluntariado equivale a muchas vidas, y todas ellas las habrás vivido con personas que permanecerán en la tuya para siempre. Y esto, esa amistad indestructible, es solo uno de los miles de motivos por los cuales un voluntariado es algo que te cambiará la vida a mejor.